El Sistema: al público le puede caer bien
El Sistema, la última de las cinco películas dominicanas que se estrenan en el 2006, tiene defectos y virtudes. Sus defectos y sus virtudes las expondremos a continuación, pero la realidad del impacto será la que proclamada por las taquillas, debido a que -si la gente se pone en "onda"-, si se identifica con esta trama de acción policial con una mezcla de ritmos populares, ambiente de barrio, violencia, amor, humor a ratos y bien pensado desde la imaginería popular, sexo, opulencia y una realización digna, ahí mismo se hará la diferencia.
El Sistema puede ser una sorpresa en taquilla.
Será el derecho de Arturo Rodríguez, Chuchi Elías y Armando Almánzar el decir con plena objetividad, lo positivo o lo negativo de El Sistema (y no sigan pidiendo que ellos hagan películas, que ese no es su papel). La crítica va a poner su posición -cualquiera que fuese, la abanderamos desde este blog-, pero lo más probable es que la gente simplemente acuda a disfrutar El Sistema. Sin embargo, la película de Humberto Espinal tiene escasas posibilidades de ser nominada a los Óscares como producción extranjera.
Factores positivos:
- El éxito incomparable de haberla realizado. De haber pasado del idealismo que nace cuando se sale de la Escuela de Cine, al momento de filmar y editar lo que se haya propuesto el creador o creadora.
- El género en que se basa, (el triller de mucha acción).
- El trasfondo del romance y la sensualidad de muchas de sus escenas, la violencia (a veces exagerada sobre todo en los casos sangrientos),
- Su música raeguetonera bastante buena, una musicalización en general acertada.
- El dominio del lenguaje popular.
- Unos toques de humor bien pensados.
- Y un guión coherente y bien desarrollado, (que pudo haber sido mejor puesto en escena, perfecto), pero válidamente puesto en pantalla de acuerdo con las condiciones de este grupo lidereado por Humberto Espinal y Matty Henríquez.